La red social X, antes Twitter, construirá en Austin, Texas (sur), una oficina dedicada a la moderación de la plataforma para luchar contra los contenidos relacionados con abusos sexuales a menores, un tema que preocupa a los políticos estadounidenses.
El objetivo inicial de este Centro de Excelencia para la Seguridad será reclutar a “un centenar de moderadores”, centrados principalmente en este tipo de mensajes, al igual que en otras violaciones de las reglas de la red social, explicó a la AFP Joe Benarroch, director de operaciones de X.
“X NO tiene una línea de negocio centrada en los niños, pero es importante que hagamos estas inversiones para impedir que los delincuentes utilicen nuestra plataforma para CUALQUIER distribución o compromiso con contenidos de explotación sexual a menores”, destacó Benarroch.
La compañía comprada por Elon Musk a finales de 2022 emitió el viernes un comunicado sobre sus esfuerzos en este ámbito, al afirmar que estaba “decidida a hacer X inhóspito para los actores que buscan explotar a menores”.
Benarroch también reiteró que los menores de 13 años no pueden abrir una cuenta. Los adolescentes menores de edad que se registren estarán sujetos a normas más estrictas en materia de confidencialidad de datos y no serán objeto de publicidad.
Estos anuncios se producen antes de una importante audiencia en el Senado estadounidense el miércoles, titulada Los gigantes tecnológicos y la crisis de los abusos sexuales a menores en Internet.
Musk compró Twitter con la promesa de recuperar la “libertad de expresión”. Muchas normas se han retirado o suavizado, y muchas personalidades vetadas han podido regresar.
En diciembre, Bruselas abrió una “investigación formal” a X por supuestas infracciones de las nuevas normas europeas sobre moderación de contenidos y transparencia, como un número insuficiente de moderadores y una denuncia ineficaz de contenidos ilegales.