El amor no es suficiente

El amor no es suficiente cuando no es recíproco, cuando la otra persona—sea un amigo, un familiar o una pareja—no lo recibe ni lo devuelve de la misma manera.

Amar a alguien es despojarte de miedos, soltar ataduras y entregarte por completo. Pero con el tiempo entendí que amar va mucho más allá de compartir momentos o escuchar verdades a medias. Amar también es enfrentar la realidad y reconocer que el amor propio debe estar por encima de cualquier amor hacia otra persona.

He sufrido por amor. He caído en un círculo vicioso donde amé a la persona equivocada, donde no fui correspondida y donde terminé perdiéndome a mí misma por esperar algo que nunca llegó.

Pero también fui lo suficientemente valiente para salir de ese falso amor. Un amor en el que alguien lo daba todo por mí, pero en el que yo no estaba preparada para recibir.

Poco a poco he entendido que el amor no lo es todo. Que el apego emocional existe y que quienes sufrimos por amor solemos ser más vulnerables a que jueguen con nuestros sentimientos. Y sí, soy de las que entrega sin medida, de las que ama con el alma, sin pensar en el mañana.

Pero también soy de las que aprenden a soltar. Porque a veces, dejar ir duele menos que aferrarse a un amor que nunca fue nuestro.